Si vas a viajar a alguna parte del mundo, no siempre existen las comodidades de aseo.
Eso significa que a veces tengas que arreglártelas por tu cuenta, y usar un baño en cuclillas (también conocido como “Squatty Potty” o baño del Este) se vuelve una necesidad.
En lugar de sentirte intimidado por el baño en cuclillas, trata de ver la experiencia como una oportunidad para conectarte más con tu cuerpo.
Lee el paso 1 para tener más información en cómo hacer esto de forma saludable, usando buena higiene.
2 Vierte un poco de agua en el inodoro. Si no hay un mecanismo de descarga, humedecer la superficie del baño hará más fácil limpiarlo cuando hayas terminado. Debe de haber cerca un balde lleno de agua. Si no lo hay, consigue uno de otro puesto. Si está vacío, llénalo.
3 Bájate los pantalones o levántate la falda. Ten cuidado y no dejes que tu ropa toque el suelo o se interponga en el camino. Si tienes puestos pantalones largos o cortos, ayudará que te saques una pierna completamente y subas y apoyes la otra parte de los pantalones en el muslo de la otra. Si tienes una falda, pliégala y métela en la banda de tu cintura para así tener tus manos libres.
4 Ponte en cuclillas con los talones apoyados en el suelo. Quizás estés acostumbrado a ponerte en cuclillas con los pies juntos y sobre las puntas, pero esta posición es muy inestable y dura para las rodillas. Ponerse en cuclillas con los pies separados, apoyados al suelo y alineados con la cadera o los hombros, facilitará mantener la posición por un período prolongado de tiempo (si vas a Asia, podrás notar que en público muchas personas están en esta posición mientras esperan). Apoya tus pies en las bases de descanso que hay en algunos de estos baños, pero si no las hay, apoya tus pies a cada lado del baño y ponte en cuclillas hasta abajo.
5 Haz lo tuyo. Si defecas, el proceso debería de ser relativamente sencillo. De hecho, algunas investigaciones sugieren que ir al baño en la posición de cuclillas, es en muchos aspectos lo mejor para tu salud. [2]
6 Si eres una mujer y orinas en cuclillas (suponiendo que no prefieres orinar de pie, lo cual es posible), puede ser todo un reto mantener la orina lejos de donde no quieres que vaya (fuera del baño, por tu pierna, en tu ropa). Ten en mente los siguientes consejos, que se aplicarán tanto cuando estés en cuclillas sobre el inodoro o detrás de un árbol:
7 Enjuágate o límpiate. Si tienes tu propio papel higiénico, utilízalo y no lo tires en el inodoro cuando hayas terminado; la mayoría de los baños en cuclillas (incluso los que tienen mecanismo de descarga) se obstruyen. Si hay un balde de agua cerca, usa tu mano derecha para echarte el agua encima mientras con la mano izquierda te aseas. (Es por esto que en algunos países, las personas no se dan la mano ni comen con la mano izquierda.[3]) Luego enjuaga tu mano izquierda y sécate con papel higiénico o una tela.
8 Descarga. Si hay un mecanismo de descarga, esta parte será bastante obvia: pulsa el botón, tira de la cadena o lo que sea. De lo contrario, vierte agua en el inodoro hasta que los restos desaparezcan. Si el inodoro tiene un mecanismo de descarga, no lo acciones hasta que estés de pie porque te podrías salpicar.