Por Kate Kelland
Las leyes contra el uso de cannabis han fracasado en sus intentos por frenar el consumo a nivel mundial y han llevado a políticas intrusivas, costosas y que dividen a la sociedad, según un grupo de expertos en drogas.
En un libro publicado el martes sobre las políticas en torno al cannabis, los expertos dijeron que si bien la droga perjudicaba a los usuarios, socialmente tenía un impacto modesto, mientras que la cocaína y el alcohol tenían efectos potencialmente más destructivos.
“Es hora de que los gobiernos de todo el mundo revean la política sobre el cannabis”, dijo Peter Reuter, profesor de políticas públicas de la Universidad de Maryland y uno de los cinco coautores del libro.
Estudios científicos han sugerido que fumar cannabis puede duplicar el riesgo de desarrollar psicosis.
Un estudio del British Medical Journal mostró el mes pasado que la gente que fumó “skunk” -una potente forma de cannabis- tiene siete veces más posibilidades de desarrollar enfermedades psicóticas, como esquizofrenia, que quienes fuman “hachís”.
Reuter dijo que las autoridades deberían reconocer “la creciente evidencia de que la criminalización del uso es un disuasivo menor” y reconocer la importancia del desarrollo de “formas responsables de administrar la oferta, en vez de crear grandes mercados ilegales”.
A pesar de las leyes que prohiben su consumo, hasta 190 millones de personas consumen cannabis en todo el mundo, según estimaciones de Naciones Unidas, lo que equivale al 4 por ciento de la población adulta.
Fuente ReutersAmericalatina