Tener diabetes significa que estás monitoreando con frecuencia los niveles de glucosa en la sangre para mantenerlos cerca del rango normal y así evitar que las subidas o caídas extremas del azúcar, puedan causarte complicaciones.
Pero, ¿cuál es la causa de las fluctuaciones en los niveles de glucosa (azúcar)? Aquí te explicamos.
Cuando tienes diabetes, es importante que estés familiarizado con los números que indican si tus niveles de glucosa en la sangre están altos o bajos. Algunas variaciones requieren tu atención, pues pueden implicar que necesites hacer un ajuste en tu dieta, en la dosis de tus medicamentos (ya sea medicamentos orales o insulina) y/o en tu estilo de vida (tu actividad física).
Seguramente, si tienes diabetes ya conoces tu cuerpo y sabes que te da señales para identificar cuando hay fluctuaciones significativas en los niveles de la glucosa, los cuales se consideran normales cuando están en el rango de 70 a 100 miligramos (70-100 mg/dl). Aunque la única forma de saber exactamente cómo está el nivel de glucosa en la sangre es midiéndola.
Es normal que los niveles de la glucosa en la sangre varíen durante el día, tanto en las personas con diabetes como en las personas que no padecen dicha condición. Lo que comes, tu nivel de actividad física, cuando se tiene alguna enfermedad (como un resfriado, una gastroenteritis, etc.) e incluso factores como el estrés, influyen en las fluctuaciones que puede tener tu glucosa en la sangre. Sin embargo, cuando estos niveles de azúcar en la sangre son muy altos o muy bajos, hacen que no te sientas bien.
Si tienes la glucosa en la sangre (glucemia) en niveles altos, lo que se conoce como hiperglucemia es importante encontrar la causa para corregirla. Los niveles de azúcar elevados en la sangre se presentan cuando el cuerpo no produce suficiente insulina. También se presenta cuando el organismo no puede utilizar la insulina que produce adecuadamente (a esto se le conoce como resistencia a la insulina). De cualquier manera, hay que tomar cartas en el asunto porque la elevación de la glucosa en la sangre pueden causar problemas de salud y complicar tu diabetes.
Algunas de las complicaciones de la hiperglucemia incluyen: ataques al corazón, derrame cerebral, problemas con el funcionamiento de los riñones, alteraciones en la vista y daños en los nervios (neuropatía). Entre los síntomas de la hiperglucemia están: mucha sed, ir al baño con frecuencia y presencia de azúcar en la orina.
Algunas causas de hiperglicemia incluyen: algo que comiste o bebiste (el café de la mañana, por ejemplo), desequilibrio en las hormonas o si tu cuerpo está combatiendo alguna infección. Otras causas serían:
Si tienes diabetes tipo 1, probablemente no te inyectaste la cantidad indicada de insulina
Si tienes diabetes tipo 2, puede ser que hayas comido más de lo debido o no hayas hecho suficiente ejercicio.
El estrés y las preocupaciones
Un resfrío o una gripe
Si te mides tu glucosa y está más alta de lo normal, debes tomar acción: hacer ejercicio por lo general baja los niveles de glucosa en la sangre. Sin embargo, si el nivel de tu glucosa sobrepasara los 240 mg/dl será necesario hacer una prueba de orina para determinar si hay cetonas (residuos que resultan de cuando el organismo descompone las grasas) presentes. En caso de que así sea, no se debe realizar actividad física. Tu médico te indicará cuál es el mejor tratamiento o qué pasos debes tomar.
Por otro lado, los síntomas de la glucosa baja o hipoglucemia típicamente los sospecharás si te sientes débil, cansado, sudoroso, irritable, con hambre, intranquilo, si tu corazón late rápidamente (a esto se le llama taquicardia) y/o algunas personas pueden tener visión borrosa transitoriamente. Si tienes un monitor de glucosa y ves que tu nivel está por abajo de 70 mg/dl, necesitas atención inmediata. En casos muy severos la persona puede perder el conocimiento.
La hipoglucemia se produce cuando el azúcar del cuerpo se agota con demasiada rapidez; cuando la glucosa es liberada al torrente sanguíneo con lentitud o se libera demasiada insulina en el torrente sanguíneo. Las causas más comunes de la baja de glucosa en sangre o hipoglucemia son:
Saltarse comidas
Demorarte para comer
Tomar la insulina o el medicamento para la diabetes en el momento equivocado
Tomar accidentalmente demasiada insulina o medicamento para la diabetes
Hacer ejercicio extenuante o en un momento del día que no es habitual para la persona con diabetes
Tomar alcohol
Si te baja la glucosa debes tomar de inmediato medidas como ingerir 15 gramos de carbohidratos como por ejemplo: una cucharada de miel, tres tabletas de glucosa, una cucharada de azúcar sola o disuelta en agua, ½ taza de jugo (zumo) de naranja o de manzana, ½ vaso de soda regular.
Se recomienda esperar 15 minutos y medirse la glucosa en la sangre para ver si ya está en un nivel normal. Si al cabo de los 15 minutos la persona no se siente bien, se debe repetir lo anterior.
Si piensas que podrías estar teniendo bajas de azúcar, revisa tus niveles de azúcar en la sangre y habla con tu médico. A veces estas bajas de azúcar pueden suceder durante la noche. Algunos síntomas que podrían sugerir hipoglucemia durante la noche incluyen sudoración nocturna o que notas que las sábanas o la piyama está húmeda cuando te despiertas, o si tienes pesadillas con frecuencia, o si te despiertas con dolor de cabeza todos los días, por ejemplo. Y también es importante que le preguntes acerca del glucagón, una medicina que contrarresta el efecto de la insulina para casos de hipoglucemia severa.
La mejor manera de evitar las grandes fluctuaciones en los niveles de la glucosa es controlar adecuadamente tu diabetes. Consulta con tu médico y tu equipo de salud si tienes dudas al respecto.