Gracias a sus efectos de frescura, la hoja de menta es ideal para preparar infinidades de platos y bebidas que ayudan a combatir el azotador calor que se siente en el verano.
Y es que la menta es una hierba comestible muy utilizada en el mundo culinario. Es realmente apreciada por su aroma fuerte y refrescante.
Además de la cocina esta hierba puede usarse con fines medicinales o simplemente por su fragancia, para tomar un baño relajante.
Debido a su versatilidad es un ingrediente que combina muy bien con otras hierbas como es el caso de la albahaca, el eneldo y el perejil.
La pequeña planta que engalana los platos de los chefs por su sabor extra a la comida, no puede quedarse fuera de la lista de compras de las amas de casa.
Esta hierba crece tan fácilmente -prácticamente- en cualquier lugar, que es posible cultivarla en casa, para tener siempre a mano un manojo de este singular ingrediente, que suele crecer en abundancia.
Cultivo. El cultivo es realmente fácil, sólo basta sembrarla en una maceta con tierra negra y regarla de agua con regularidad además de asegurarse de que reciba suficiente sol. No necesita fertilizar la planta si tiene agua y sol adecuados.
Propiedades y beneficios. Entre las propiedades más significativas están: la vitamina B9, la cual contribuye a la formación de células sanguíneas y glóbulos rojos, ayudando a prevenir la anemia y a mantener sana la piel.
Hay otras propiedades de la menta. La planta es rica en vitaminas C y A, además de contener calcio y hierro. La vitamina C actúa como un antioxidante poderoso y como sintetizadora del colágeno. La vitamina A hace bien a la piel, los cabellos y los huesos; el calcio actúa en la formación de huesos y dientes y, finalmente, el hierro, es beneficioso para la sangre.
La rica composición de la menta hace de ella una planta con importantes propiedades saludables para el organismo, sobre todo para el aparato respiratorio y el digestivo. De hecho, tan sólo su aroma posee la cualidad de refrescar las vías respiratorias y, al mismo tiempo, de estimular el apetito, y su aceite también posee cualidades curativas..
Receta
Caracolas de salmón con salsa de menta
1 libra de salmón
1 cucharada de vinagre de vino
1 cucharada de vinagre balsámico
1 cucharadita de azúcar
1 cucharada de aceite virgen extra
Pimienta hojas de menta
Preparación. Poner a reducir, a fuego lento, los vinagres y el azúcar en una cazuela. A los 10 minutos, picar unas 6 hojas de menta y añadirlas. Limpiar el salmón de piel y espinas y cortarlos en tiras finas. Enroscarlas sobre si mismas y pincharlas con un palito de brocheta. Salpimentar y cocinarlas sobre una plancha bien caliente, durante un par de minutos por cada lado. cortar el zuccini en bastones gruesos, sazonarlos y saltearlos en una sartén con aceite.
Para los brownies:
2 tazas de azúcar
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 taza de mantequilla
115 gramos de chocolate de repostería
1 taza de harina
Para la cobertura:
8 cucharadas de mantequilla
2 tazas de azúcar glas
1 ½ cucharaditas de extracto de menta
3-4 cucharadas de crema
1/2 taza de chispas de chocolate
Colorante verde
Preparación. Precalentar el horno a 190ºC. En un recipiente grande batir los huevos hasta que estén suaves y esponjosos. Agregar el azúcar y el extracto de vainilla. Batir bien. En una olla pequeña derretir la mantequilla y los trocitos de chocolate. Revolver hasta que estén suave. Añadir esta preparación a la mezcla de huevo y azúcar. Sumar la harina y revolver. Luego verter la mezcla en una bandeja enmantecada. Colocar en el horno y hornear a 190º grados durante 25 minutos. Retirar del horno y dejar enfriar. Para hacer el glaseado batir 4 cucharadas de mantequilla, el azúcar glas, el extracto de menta y la crema. Agrega el colorante verde. Cubrir los brownies y colocarlos en la nevera durante 1 hora. Cubrir con el resto de la mantequilla derretida y con la chispa de chocolate.
Sopa de menta y albahaca con base de naranjas
1 1/2 tazas de yogur natural sin grasa
1/2 taza de crema agria
1/3 taza de hojas de menta, además de unas ramitas extra para adornar
1/4 taza de perejil
3 cebolletas picadas
2 pepinos pelados, sin semillas y picados
1 diente de ajo, picado en trozos grandes
Sal y pimienta blanca al gusto
Preparación: Colocar todos los ingredientes en una licuadora y licuar hasta lograr una mezcla suave. Transferir a un recipiente. Cubrir y refrigerar durante al menos dos horas. Colocar en platos hondos y servir, adornada con algunas ramitas de menta.
