1 mango pelado, sin hueso y cortado en trozos
400 ml de leche de soja
1 cuharada de semillas de sésamo (o pipas de girasol)
Elaboración
Meter el mango y la leche en la batidora y batir hasta obtener una mezcla uniforme. Espolvorear con las semillas de sésamo (o pipas de girasol) y beber inmediatamente. Si lo cuelas quedará más suave.
El mango está repleto de betacaroteno y vitamina B3, ambos favorecen la buena salud cerebral.
La soja, con alto contenido en vitamina B6, interviene en la formación de neurotransmisors y evita el deterioro de la memoria.