Al concluir el Mundial del Futbol habrá más aficionados con triglicéridos y colesterol alto al abusar del refresco, cerveza y botana, y quienes padecen de enfermedades crónicas degenerativas y cardiovasculares podrán sufrir de alteraciones si descuidan su salud al dejarse llevar por la emoción, afirmó Alejandro Barrat Hernández, médico internista de la Unidad Médica de Alta Especialidad del IMSS en Veracruz.
Está demostrado por la Federación Mexicana de Diabetes que una persona en 90 minutos, tiempo en que dura el partido de futbol, llega a consumir hasta 2 mil 500 calorías por comer papas fritas e ingerir refresco, cerveza o licor, cuando el parámetro debe ser menor a las 2 mil calorías durante todo el día.
A raíz del Mundial de Futbol, la Federación Mexicana de Diabetes recomendó que las personas que padezcan enfermedades crónicas degenerativas como diabetes e hipertensión, así como cardiovasculares deben estar alertas para no sufrir alteraciones porque podría ser de riesgo para su salud.
El especialista comentó que por los malos hábitos alimenticios y falta de ejercicio, principalmente, el 18 por ciento de la población mexicana menor de 20 años de edad presenta problemas de diabetes y renales, lo que tradicionalmente se veía en pacientes adultos.
Estudios revelaron que hay mexicanos que llegan a consumir entre dos a tres litros diarios de refresco, de ahí la gran preocupación del sector Salud.
La dieta actual tiende más al sedentarismo, a la ingesta alta de carbohidratos y ácidos grasos saturados, lo que les está creando una resistencia a la insulina.
De ahí que también se prevea que la enfermedad cardiovascular en la próxima década incrementará drásticamente y a edades más tempranas, lo que ocasionará infartos y daños renales en población jóven.