El coco protege al cuerpo contra el cáncer y la osteoporosis; es beneficioso para el corazón, la piel y el cabello

La planta de coco, cuyo nombre científicos es Cocos nucifera, es el único miembro o especie en el género de plantas Cocos, y se piensa que es originaria del sureste asiático, región donde se ha cultivado durante muchos siglos.

Sin embargo, hay debates al respecto puesto que también se han encontrado evidencias que indican que también ha estado presente en América y Nueva Zelanda desde hace mucho tiempo.

El árbol es bastante grande, puede llegar a medir hasta 30 m de altura y ciertamente en la actualidad se puede encontrar en casi todas las zonas costeras tropicales del mundo. Técnicamente el coco es una drupa, que se refiere a un fruto que tiene una cubierta dura que contiene un “hueso” leñoso y una “pulpa” fibrosa o carnosa. Algunas drupas son la aceituna, el mango, la ciruela y la nuez.

Hay dos partes comestibles del coco. La cáscara está compuesta de dos capas, la capa fibrosa superior externa generalmente se retira y se desecha para comerciar los cocos, la siguiente capa rígida es la cáscara interior, pertenece al “hueso” y envuelve a las partes comestibles, que son la pulpa y el agua.

Beneficios del coco
En algunos lugares del planeta, el árbol de coco es conocido como “El árbol de la vida”, y no por nada obtuvo ese nombre; los usos del coco para favorecer a la salud son tan efectivos como delicioso es su sabor. Cada parte comestible del coco aporta diversos beneficios a la salud humana.

El coco es una excelente fuente de manganeso, aporta el 60% de la ingesta diaria recomendada.
Uno de los beneficios del coco lo aporta su alto contenido de ácido poliinsaturado omega-6.
Entre las propiedades del coco se encuentra el ácido láurico, una sustancia efectiva para combatir parásitos intestinales.
La fibra y otros compuestos del coco ayudan a aliviar muchos padecimientos del sistema digestivo.
Se ha demostrado que el coco ayuda a proteger al cuerpo contra el cáncer y la osteoporosis.
El corazón, la piel y el cabello también pueden encontrar beneficios en el coco.

El coco y los beneficios para la piel

El coco contiene vitamina E, la cual ayuda a tener piel y cabello saludables; y ya que el coco contiene ácidos grasos, el efecto de la vitamina E se incrementa. Puede llegar hasta a contrarrestar los efectos del envejecimiento, otorgando una piel y cabello con aspecto joven y saludable.

Propiedades rehidratantes
El agua de coco se considera un rehidratante natural debido a su alto contenido de minerales y electrolitos, que es lo que principalmente pierde el cuerpo mediante el sudor cuando se realiza actividad física.

El ácido láurico del coco
El aceite del coco, el cual está presente en la pulpa o “carne” contiene un ingrediente llamado ácido láurico, el cual ayuda a la digestión y protege al cuerpo de infecciones causadas por bacterias, virus y hongos.  Así que al consumir la pulpa del coco se fortalece el sistema inmunológico de nuestro cuerpo.

Las grasas del coco
Es cierto que el coco contiene grasas saturadas, las cuales son asociadas con términos negativos para la salud, y por esta razón, el aceite de coco, y el coco en sí, a veces no es percibido como un fruto muy saludable. Lo que muchos no dicen y otros no saben es que estas grasas están constituidas de ácidos grasos de cadenas cortas y cadenas medias.

  El cuerpo puede convertir fácilmente a estos dos tipos de ácidos en energía en vez de almacenarlos como grasa corporal. Para una persona con desnutrición y fatiga, el aceite de coco representa una formidable fuente de energía. Además, estos ácidos tienen propiedades antioxidantes, que pueden evitar los efectos del envejecimiento, detener la degeneración macular y prevenir la formación de células cancerígenas.

Estas grasas no son dañinas para el corazón, por el contrario, ayudan a reducir los niveles de colesterol, proporcionando un corazón saludable y disminuyendo los riesgos de infartos.

Contraindicaciones del coco

Se debe tener mucho cuidado al comprar aceite de coco, algunos de los aceites son hidrogenados o parcialmente hidrogenados, lo cual altera la composición del aceite, disminuyendo sus cualidades benéficas. Al comprar aceite de coco hay que ser muy cuidadosos de comprar únicamente aceite de coco no hidrogenado. Si se pretende consumir aceite de coco para fines de salud, también puede sustituirse por un té de coco, aunque las propiedades pueden reducirse.

El agua de coco puede disminuir la presión por lo que puede incrementar los efectos de los medicamentos usados para dicho fin, pero  se debe evitar tomarla un par de semanas antes de una cirugía y también hay que consultar a un médico en el caso de tomar medicamentos que disminuyan la presión arterial.

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