Por qué es dañino dormir después de comer

Si bien no es cierto que los alimentos que se consumen antes de dormir se transforman en grasa durante el sueño, existen razones valederas para evitar ir a la cama luego de haber comido.

Aunque esté dormido, el organismo aún trabaja para procesar los últimos alimentos ingeridos, y este proceso podría provocar desde indigestiones hasta riesgos de accidente cardiovascular, afirma el sitio web Buena Salud.

Aumento de peso. En este caso, es más importante el momento en que se come que lo que en realidad se ingiere, pues aunque se consuma los alimentos más saludables, si se hace en un mal momento, se dificulta el aprovechamiento de sus propiedades.

El principal problema de comer antes de dormir es que el mal descanso contribuye al aumento de peso. Si bien no es cierto que los alimentos nocturnas se transforman en grasas, existen mayores probabilidades de que la última comida no sea digerida como corresponde, por lo que se podría consumir más grasas y calorías de las necesarias.

Acidez. La acidez estomacal es uno de los resultados de la combinación del sueño y digestión, ya que el organismo se recarga a causa del exceso de ácido en el estómago, lo que origina la sensación de ardor que podría extenderse hasta el tórax y la garganta, y que es acompañada por eructos.

Reflujo ácido. El reflujo o flujo gastroesofágico es una enfermedad se origina cuando la válvula que se ubica entre el estómago y el esófago -epiglotis- no se cierra por completo. Esto ocasiona el paso de los ácidos gástricos hasta alcanzar la garganta, lo que produce ardor y severos daños en las membranas mucosas si este problema no se trata a tiempo. Hay alimentos que agravan este problema.

Accidentes cerebrovasculares. Investigaciones realizadas por la Universidad de Ioannina, en Grecia, constataron que, mientras más tiempo se deje entre el sueño y la última comida, se reduce en gran manera el riesgo de padecer un accidente cerebrovascular.

Aunque no se ha llegado a una explicación precisa para esto, se supone que el reflujo gástrico podría causar una suspensión de la respiración, o apnea, durante el sueño, lo cual suele ser vinculado con los problemas cerebrovasculares.

Para una siesta adecuada:

- Tomar una siesta de 10 a 15 min luego de comer no debe durar más de 30 minutos. Esto ayuda, es bueno para el rendimiento mental.

- Un tiempo mayor no es beneficioso, porque se inicia un sueño profundo del que cuesta despertar y disminuye el estado de alerta.

- Para reposar, es mejor emplear un sofá o silla para evitar el reflujo.

Otras recomendaciones:

Comer a tiempo y mantener horarios. El desorden de la dieta afecta directamente al sueño y deteriora la salud. Acostarse al menos dos horas después de comer.
Comidas abundantes y condimentadas estimulan mayor secreción de jugo gástrico, lo que puede causar acidez. La digestión se hace lenta y es más difícil conciliar el sueño.
Las proteínas pueden reducir la secreción de serotonina (que induce el sueño) y estimular la secreción de adrenalina, que mantiene el estado de alerta.
Las metilxantinas (sustancias estimulantes de los alimentos) cafeína del café, teína, teofilina del té y teobromina del chocolate mantienen el estado de alerta y evitan conciliar el sueño.

Te podría interesar

Deja tu comentario