Ciertas comidas, en lugar de deleitar tu paladar podrían convertirse inadvertidamente en tu peor enemigo. ¿Sabías que las papas en una de esas te mandarían al hospital? Descubre, además de éste, qué otros alimentos a veces pueden representar un riesgo para tu salud.
Aunque parezcan inofensivas, cuando las papas crudas reciben demasiada luz y se desarrolla en ellas un químico llamado solanina, podrían causarte diarrea y vómitos durante uno o seis días, así lo considera Joan McVoy, del Centro de Envenenamiento de Nebraska.
¿Estoy en peligro?
De acuerdo con McVoy, el signo revelador de la solanina es un tinte verdoso que se ubica justo debajo de la piel de la papa. Sin embargo, no hay nada que temer, pues una vez que es pelada esta capa, estos alimentos pueden consumirse sin problema alguno.
2. Huesos y semillas
Comer peras, manzanas, mangos, melocotones, albaricoques y cerezas también representa un grave peligro, sobre todo, por el riesgo de ingerir por accidente la amigdalina, una sustancia química tóxica presente en los huesos y semillas de estos frutos, los cuales más tarde podrían reaccionar en ácido cianhídrico.
¿Cuál es el problema?
Se ha encontrado que esta sustancia puede causar todo tipo de problemas, como dolores de cabeza, convulsiones, náuseas o vómitos, así como ritmo cardiaco y presión elevados. Según McVoy, si tragas por accidente una semilla o dos no hay de qué preocuparse, la cuestión está en no abrirlas intencionalmente.
3. Setas venenosas
Mientras que los hongos de supermercados “son totalmente seguros para el consumo, es casi imposible identificar los hongos dañinos en el medio silvestre”, considera McVoy. De hecho, algunos de ellos podrían provocarte desde una diarrea hasta dañar tu hígado y los riñones.
¿Qué hacer?
Aunque a simple vista no causan ningún malestar, los síntomas causados por estos alimentos podrían aparecer hasta varios días después. La mejor opción ante estos casos, es evitar el consumo de hongos silvestres en conjunto, considera McVoy.
4. Habichuelas rojas
Los frijoles ricos en fibra pueden causar malestar estomacal si son consumidos crudos. Esto se debe a que contienen un tipo de agente tóxico conocido como lectinas, el cual puede reaccionar tanto positiva como negativamente en el organismo.
¿Qué hacer?
Si tienes que cocinar estos alimentos, lo más recomendable es dejarlos remojar durante cinco horas y desechar el agua tiempo después. Para mayor seguridad calienta los frijoles por 10 minutos y después cuélalos, aconseja McVoy.
Sin lugar a dudas, las habas son una excelente fuente de proteínas, ácido fólico y fibra, pero también contienen una toxina conocida como limarin que puede causar náuseas, vómito y dolor abdominal. Para que no te haga daño esto deberías cocinarlos durante al menos, diez minutos.
Aunque no es un alimento básico de la cocina americana, los hidratos de carbono de esta clase son los más consumidos en todo mundo, explica McVoy. El problema está en que la savia que se encuentra dentro de las hojas de la yuca, contienen cianuro tóxico que puede causar problemas en el estómago, corazón y a nivel neurológico.
Sí, leíste bien. ¿Sabías que el área cercana al tallo y las hojas contiene la toxina tomatina? Quizás el nombre no te suene familiar, pero es un componente que es empleado con gran frecuencia en el control de las plagas.
8. Cacahuate (Maní)
De acuerdo con la Academia Estadounidense de las Alergias, este alimento puede provocar algunas intolerancias que van desde una intoxicación leve hasta la muerte. El problema de este alimento, es que muchos niños, a los cuales no se les ha detectado la complicación, fallecen por esta causa.
Se trata de uno de los alimentos que más se consumen en países como México. Sin embargo, su ingesta excesiva podría provocarte problemas estomacales que pueden ir de los leves a los severos. Esto se debe a la capsaicina, un compuesto que se encuentra presente en este alimento y que puede resultar muy irritante en el organismo.
Este alimento rico en proteínas, también ha contiene niveles de mercurio, el cual es sumamente perjudicial para la salud, especialmente para mujeres embarazadas y niños pequeños. La posible solución para evitar este problema sería el consumo de atún con moderación.