El virus del papiloma humano (VPH) es la infección de transmisión sexual más frecuente en los Estados Unidos. Algunos de los efectos que el VPH puede tener sobre la salud se pueden prevenir con vacunas.
El VPH es la infección de transmisión sexual (ITS) más común. El VPH es un virus distinto al del VIH y VHS (herpes). El VPH es tan común que casi todos los hombres y todas las mujeres sexualmente activos lo contraen en algún momento de su vida. Hay muchos tipos distintos de VPH. Algunos tipos pueden causar problemas de salud como verrugas genitales y cánceres. Pero hay vacunas que pueden evitar que estos problemas de salud ocurran.
Usted puede contraer el VPH al tener relaciones sexuales orales, vaginales o anales con una persona que tenga el virus. Se transmite con mayor frecuencia durante las relaciones sexuales vaginales o anales. El VPH puede transmitirse incluso cuando la persona infectada no presenta signos ni síntomas.
Toda persona sexualmente activa puede contraer el VPH, incluso si tiene relaciones sexuales con una sola persona. También es posible que presente los síntomas años después de tener relaciones sexuales con una persona infectada, lo que dificulta saber cuándo se infectó por primera vez.
En la mayoría de los casos el VPH desaparece por sí solo y no causa ningún problema de salud. Pero cuando el VPH no desaparece, puede causar problemas de salud como verrugas genitales o cáncer.
Generalmente, las verrugas genitales aparecen como pequeños bultos o grupos de bultos en la zona genital. Las verrugas genitales pueden ser pequeñas o grandes, planas o elevadas, o tener forma de coliflor. Un proveedor de atención médica puede por lo general diagnosticar las verrugas al mirar la zona genital.
El VPH puede causar cáncer de cuello uterino y otros cánceres como el de vulva, vagina, pene o ano. También puede causar cáncer en la parte de atrás de la garganta, como en la base de la lengua y las amígdalas (llamado cáncer orofaríngeo).
El cáncer generalmente puede tardar años en aparecer —incluso décadas— después de que una persona haya contraído el VPH. Los tipos de VPH que pueden causar verrugas genitales no son los mismos que los que pueden causar cáncer.
No hay manera de saber quiénes con el VPH presentarán cáncer u otros problemas de salud. Es posible que las personas con sistemas inmunitarios débiles (incluidas las personas con el VIH/SIDA) tengan menor capacidad para combatir el VPH y más probabilidad de presentar problemas de salud derivados del virus.
Usted puede hacer varias cosas para reducir su probabilidad de contraer el VPH.
Vacúnese. Las vacunas contra el VPH son seguras y eficaces. Pueden proteger a los hombres y a las mujeres contra las enfermedades causadas por el VPH (incluso el cáncer) cuando se administran a las edades recomendadas (vea a continuación "¿Quién se debe vacunar?"). Las vacunas contra el VPH se administran en tres inyecciones en un periodo de seis meses. Es importante recibir las tres dosis.
Hágase una prueba de detección del cáncer de cuello uterino. Las pruebas de rutina en las mujeres de 21 a 65 años pueden prevenir el cáncer de cuello uterino.
Si usted es sexualmente activo:
Todos los niños y las niñas de 11 o 12 años deben vacunarse.
Se recomiendan también para los hombres hasta los 21 años que no la hayan recibido antes y para las mujeres hasta los 26 años, si no se vacunaron cuando eran menores.
La vacuna también se recomienda a los hombres homosexuales y bisexuales (o cualquier hombre que tenga relaciones con hombres) hasta los 26 años. También se recomienda a los hombres y a las mujeres con el sistema inmunitario deprimido (incluidas las personas con el VIH/SIDA) hasta los 26 años, si no recibieron la vacuna completa cuando eran más jóvenes.
No hay una prueba para determinar si una persona tiene o no el VPH. Tampoco existe una prueba del VPH aprobada para determinar si hay VPH presente en la boca o en la garganta.
Existen pruebas del VPH que se pueden usar para detectar el cáncer de cuello uterino. Estas pruebas se recomiendan solo para la detección en mujeres de 30 años o más. No se recomiendan para la detección en hombres, adolescentes o mujeres menores de 30 años.
La mayoría de las personas con el VPH no saben que están infectadas y nunca presentan síntomas o problemas de salud por el virus. Algunas personas descubren que tienen el VPH cuando presentan verrugas genitales. Las mujeres pueden enterarse de que tienen el VPH cuando obtienen un resultado anormal de la prueba de Papanicoláu (al hacerse una prueba de detección del cáncer de cuello uterino). Es posible que otras solo lo averigüen una vez que presentan problemas más graves por el VPH como cánceres.
El VPH (el virus): Alrededor de 79 millones de estadounidenses están infectados actualmente por el VPH. Cerca de 14 millones de personas al año contraen la infección por primera vez. El VPH es tan común que casi todos los hombres y las mujeres sexualmente activos contraerán al menos un tipo de VPH en algún momento de su vida.
Los problemas de salud relacionados con el VPH incluyen las verrugas genitales y el cáncer de cuello uterino.
Verrugas genitales: Cerca de 360 000 personas en los Estados Unidos tienen verrugas genitales cada año.
Cáncer de cuello uterino: Anualmente, más de 10 000 mujeres en los Estados Unidos contraen cáncer de cuello uterino.
Hay otras afecciones y otros cánceres causados por el VPH que ocurren en personas que viven en los Estados Unidos.
Cada año, cerca de 21 000 cánceres relacionados con el VPH podrían prevenirse con la vacuna contra este virus.
Si usted está embarazada y tiene el VPH, se podrían producir verrugas genitales o cambios anormales en las células de su cuello uterino. Los cambios anormales en las células se pueden detectar a través de una prueba de rutina de detección del cáncer de cuello uterino. Usted debe hacerse una prueba de rutina de detección del cáncer de cuello uterino, incluso durante el embarazo.
No existe tratamiento contra el virus mismo. No obstante, existen tratamientos para los problemas de salud que puede causar el VPH: