El joven soldado estadounidense KT Robbins, de 24 años, se enamoró perdidamente de Jeannine Ganaye, una francesa de 18 años. El destino los volvió a juntar.
Cuando dos personas se enamoran, ese amor perdura por toda la vida, sin importar qué pase entre ellos. Quizás no sea el momento indicado para estar juntos, pero el amor y cariño entre ambos siempre estará, incluso si rehicieron su vida con otras personas. Ni la distancia ni el tiempo son barreras para destruir este vínculo.
En plena Segunda Guerra Mundial, el joven soldado estadounidense KT Robbins, de 24 años, se enamoró perdidamente de Jeannine Ganaye, una francesa de 18 años, mientras estaba de visita en el país europeo, en 1944.
La pareja comenzó su romance rápidamente, pero dos meses después le informaron a Robbins que tenía que abandonar la aldea de Briey para luchar contra los Poderes del Eje al Frente del Este.
Aún así, el joven le prometió a su novia que intentaría volver por ella.
«Le dije que tal vez volvería y la llevaría, pero no fue así»
Pero Robbins tuvo que regresar a América a servir a su país, por lo que Jeannine quedó con el corazón destrozado.
«Cuando se fue en la camioneta lloré, por supuesto, estaba muy triste. Ojalá, después de la guerra, no hubiera regresado a América».
Jeannine aún mantenía viva la esperanza de volver a ver a su novio, por lo que cuando terminó la guerra en 1945, comenzó a aprender frases básicas en inglés, con la esperanza de que regresara por ella.
Pero Robbins tenía otros planes completamente distintos al de ella, ya que se alistó en la 26 División de Infantería, la que correspondía a la Primera División en 1940. Más tarde regresó a Estados Unidos como voluntario para servir en un batallón de panadería.
Fue en ese lugar donde conoció a su esposa Lillian. Instalaron una ferretería en Mississippi, la que tuvieron durante 50 años. Finalmente, su mujer falleció en 2015 a los 92 años.
Por su parte, Pierson también rehizo su vida, ya que se volvió a enamorar. Se casó en 1949 y se convirtió en madre de cinco hijos.
Pero Robbins nunca olvidó a Jeannine a pesar de los años. Incluso, guardó una foto de ella en blanco y negro, la que mantuvo escondida durante décadas.
La pareja se reencontró 50 años después, cuando Robbins regresó a Briey para el aniversario de Día D. Cuando fue entrevistado por unos periodistas, el hombre de 75 años le mostró la fotografía y les pidió ayuda para encontrarla, aunque él pensaba que nunca más la volvería a ver.
Los reporteros dieron con la ubicación de Pierson, quien se encontraba en una casa de retiro en Moselle, y les organizaron una reunión.
Robbins viajó al lugar y se reencontró con Jeannine, y sellaron su amor entre fuertes abrazos y miradas de complicidad.
«Yo siempre te amé. Nunca saliste de mi corazón».
Después de mostrarle la fotografía que tiene de ella, la francesa le preguntó por qué no regreso por ella.
«Siempre he pensado en él. Pensando que tal vez vendría por mí».
-Jeannine Pierson a KT Robbins-
El hombre le explicó que al casarse con Lillian le resultaba imposible volver a verla.
El amor verdadero jamás se quiebra, a pesar de la distancia y el lugar. Aunque ambas partes rehagan sus vidas, el cariño y adoración siempre estará entre ellos, incluso si no se ven en más de 50 años, tal como les pasó a KT Robbins y Jennine.
Esperemos que puedan estar juntos lo que les quede de vida.