Habrás comprobado que incluso utilizando fundas, las almohadas y las mantas terminan poniéndose amarillentas y llenas de gérmenes, pero te te enseñamos la solución a este problema.
Es fácil devolver el color blanco a todas tus viejas almohadas.
¿Asqueroso?
Ya sea por el sudor, las cremas, la laca o cualquier cosa que pase a través de las fundas, las almohadas terminan adquiriendo un color amarillento con el paso del tiempo, pero si haces un esfuerzo y las lavas con regularidad, conseguirás que mantengan el blanco original durante más tiempo.
Déjalas como nuevas
Aunque tras un lavado tradicional puedes deshacerte de los gérmenes que había en la almohada, seguramente permanezcan la manchas amarillas.
Renueva tu almohada con muy poco dinero siguiendo un sencillo truco utilizado en algunas lavanderías para devolver el blanco a las prendas que envejecieron con el tiempo.
La Solución Mágica
Los ingredientes de esta receta mágica pueden parecer un poco extraños pero en conjunto trabajan perfectamente.
Para obtener mejores resultados se recomienda que el proceso de lavado se realice con agua muy caliente.
Mezcla los siguientes componentes:
-1 Taza de detergente de lavandería-1 Taza de polvo de detergente de lavavajillas (sí, es extraño)-1 Taza de cloro-1/2 de Borax (borato de sodio)
Paso a paso
Llena un tercio de la lavadora con agua tan caliente como sea posible. Recuerda mirar las instrucciones de lavado de tus almohadas, no queremos que el remedio sea peor que la enfermedad.
Añade la mezcla que hiciste anteriormente al agua caliente y enciende la lavadora un par de minutos para que la mezcla se disuelva correctamente.
Añade las almohadas. Si lavas las almohadas de dos en dos equilibrarás la lavadora durante el ciclo de centrifugado. Llena con agua caliente lo que quede de espacio en la lavadora y enciéndela un par de minutos. Apaga la lavadora y deja las almohadas en remojo durante toda la noche.
Consejos
Después de que estén en remojo, realiza 2 ciclos de lavado completos. También puedes agregar una taza de vinagre blanco durante los ciclos de enjuagado para eliminar el rastro de detergente que pueda quedar en las almohadas.
Después del primer lavado notarás un cambio considerable en las almohadas.
Blancas y esponjosas
Seca las almohadas a la temperatura más baja posible. También puedes secarlas al air libre si hace un buen día de sol. Para conseguir que estén mullidas de nuevo, mételas en la secadora con pelotas de secado o pelotas de tenis envueltas con calcetines para evitar que suelten pelusas.
Resultado final
Tendrás tus almohadas como nuevas. Comprueba la diferencia entre el antes y el después del proceso de lavado.
