Redacción Internacional.- Una mujer pensando que tenía problemas de fertilidad se sometió a tratamientos durante varios años para poder salir embarazada, pero descubrió que el que tenía problema era su esposo.
Pues resulta que las ansias de la mujer por tener un hijo eran inmensas, así que no le importó hacerse tratamientos costosos para tener un bebé, lo que no sabía era que su esposo tenía un secreto que al parecer no le importó verla pasar por esos sacrificios.
El secreto era que el que se había sometido a una vasectomía y ella pensando que el problema era ella atribuyéndole la causa al síndrome de ovario poliquísticos que padecía.
Durante 3 años fue sometida a varios tratamientos por demás costosos, entre hormonas e invasivos. Su médico muchas veces le recomendaba que le realizaran un estudio a su esposo, pero él se negaba.
La mujer le dijo lo de intentar la fertilización invitro como última opción o dar por terminada la relación, por lo que su esposo se vio atrapado y decidió decir la verdad de lo ocurría y según cuenta quedó desvastada y decepcionada.
“Me hizo soportar 29 pruebas de embarazo negativas y numerosas inyecciones de hormonas, y nunca pensó en decírmelo. Dadas sus mentiras, creo que es mejor que no estemos casados”, aseguró”