Una mujer mantuvo 14 años una aguja en su columna vertebral, y tendría que vivir con ella el resto de su vida

Una mujer mantuvo alojada en su columna vertebral por 14 años, un aguja epidural de 3 centimetros, que la mantenía con un constante dolor de espalda, y que probalmente tenga que vivir con ella por el resto de sus vidas, debido a los altos riesgos que conlleva una operación para sacarla.

  Amy Bright, comenzó a sentir el dolor crónico en la espalda y la pierna izquierda después de dar a luz en el Hospital Naval de Jacksonville en Florida, a su hijo, que ahora tiene casi 15 años.

"Se siente como fuego, como un atizador al lado de mi cóccix", declaró¡ Bright a First Coast News.

"Y luego, en ocasiones, se dispara por el lado izquierdo de la pierna sobre la pantorrilla, y luego hacia abajo y dentro de mi pie", agregó.

.A finales de 2017, Bright no soportaba el dolor, por lo que se sometió a una tomografía computarizada, que reveló la aguja rota atrapada en sudeclasr columna vertebral.

El abogado de Bright, Sean Cronin, quien la ayudó a presentar una demanda contra el gobierno federal por negligencia médica, fraude y encubrimiento por negligencia por parte del personal del hospital, dice que está "sin palabras", porque esto no le fue revelado en ese momento a la madre.

"Cuando sacas la aguja, miras la aguja y te aseguras de que la punta esté allí. Eso falta", dijo. "Está documentado en sus registros médicos que tuvieron un intento fallido de aguja espinal en el Hospital Naval de Jacksonville en septiembre de 2003. Así que nadie más le puso una aguja en la espalda".

La aguja ha causado daños permanentes en los nervios y se espera que el dolor empeore con el tiempo, y debido a que la cirugía para quitar la pieza rota de la aguja es arriesgada, es probable que Bright tenga que vivir con ella alojada en su espina dorsal por el resto de su vida.

"Si fueran cualquier tipo de humano, hubieran dicho 'Oye, lo siento, cometí un gran error, vamos a arreglarlo'", dijo Bright,. "pero en cambio no me dijeron eso".

Fuente: actitudfem

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