(CNN Español) — “Acabé cediendo a que me besara, que me tocara de formas en que yo no quería que me tocara y en una de las instancias me agredió violentamente y sí, me violó”.
Son las palabras que la actriz mexicana Karla Souza pronunció delante de Carmen Aristegui de CNN en Español cuando contó que había sido violada por un director, sin mencionar su nombre. Después, las actrices mexicanas Karla Souza, Stephanie Sigman y Paola Núñez y la clavadista olímpica Azul Almazán revelaron que sufrieron episodios de acoso o abuso sexual en una serie de entrevistas de Carmen Aristegui en CNN en Español que ha generado gran impacto en la sociedad.
Tras estas declaraciones públicas, muchos se fueron a las redes sociales a mostrar su apoyo a las víctimas… pero otros las criticaron: ¿por qué habían tardado tanto en denunciar? ¿Por qué guardaban silencio sobre las identidades de sus agresores? Stephanei Sigman, que contó que cuando tenía 22 años fue acosada por un director y su esposa para tener relaciones sexuales con ambos, compartió en Twitter este mensaje como respuesta:
1- Por miedo
2- Porque lo primero que hace mucha gente como los que cuestionan… es minimizar y atacar a la víctima. Hacer un juicio barato y cobarde
3-El sistema de justicia en nuestro país no funciona en muchos casos
4- La violencia de género es pan de cada día
5- La mujer no tiene el mismo valor que el hombre (¡NO! NO LO TIENE)
6- Porque las que sí hablamos antes, la gente a nuestro alrededor decidió no escucharnos, darnos el avión
7- Porque no teníamos la oportunidad de hablar de esto con un medio. No eran “esos tiempos”
8-Porque no es fácil. A ver, intenten exponer esos momentos oscuros de su vida para que la gente comente tanta insensatez
9-Porque se necesitan más que pantalones y tiempo… tiempo para procesar y entender
10-Porque uno está ocupado tratando de enterrar esas experiencias en lugares donde ya no le afecten tanto
11- Porque cada quien decide cuándo, de qué, dónde y cómo hablar de cosas tan personales
12- ¿Le sigo…?
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— Stephanie Sigman (@SigmanStephanie) February 21, 2018
“Nadie se va a inventar eso”, dijo a CNN en Español Carmen Ruiz Repullo, doctora en Sociología en la Universidad Pablo de Olavide (Sevilla, España) y especializada en violencia de género. Ruiz Repullo explicó cómo es precisamente todo lo que dice esta actriz lo que hace que las mujeres se callen durante tanto tiempo.
En esencia, lo que las víctimas temen es la reacción de una sociedad que tiende a “culpabilizar a la víctima y desculpabilizar al culpable”, en palabras de esta experta. “Sigue existiendo un estigma de que cuando hay una agresión sexual la mujer ha hecho algo”, criticó Ruiz. “Siempre hay un cuestionamiento de la víctima cuando son temas de género”, agregó.
La socióloga habló de que la sociedad actual es “machista” y tiende a categorizar a las mujeres “entre buenas y malas”. “Y una mujer que ha sufrido una agresión suele estar considerada como mala mujer porque se insinuó”. Esto hace que la víctima guarde silencio sobre su agresión: “Nadie quiere estar entre las cuestionadas”, dijo.
Actrices Karla Souza, Stephanie Sigman y Paola Núñez y la clavadista olímpica Azul Almazán
“Es bien conocido el conjunto de problemas a que se enfrentan las víctimas de este tipo de violencia”, se menciona en el último informe de ONU Mujeres sobre los feminicidios en México. En el texto se habla de estas consecuencias tras violaciones: "estrés postraumático, falta de información, desconfianza, la revictimización cuando se atreven a denunciar, etc.”
Pero, ¿qué es una violación?: “Cualquier acto que degrada o daña el cuerpo y/o la sexualidad de la Víctima y que por tanto atenta contra su libertad, dignidad e integridad física. Es una expresión de abuso de poder que implica la supremacía masculina sobre la mujer, al denigrarla y concebirla como objeto”, según la definición de la ley mexicana de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
Según los datos de ese estudio de las Naciones Unidas, publicado en 2017, en 2016 se presentaron 12.896 denuncias por violación en el país, un número superior a las 12.156 acusaciones del año previo.
Los problemas de estos datos son, según la ONU, que dependen de las denuncian de las víctimas, y no todas lo hacen. Es por eso que movimientos como el #Metoo son tan importantes, de acuerdo con la socióloga. “Lo bueno es que ahora mismo hay una ola feminista que hay que aprovechar, es el momento de sacar fuera lo que hay. La cultura del miedo ha estado instaurada muchos años.
Por eso, cuando una mujer del gremio empieza a decir ‘a mí me ha pasado’ y otra dice ‘a mí también’, eso hace que salgan las que han sufrido”, ejemplificó.
Ahora bien, para Ruiz este movimiento no debería quedarse en lo estético —la denuncia pública—, sino ir un paso más allá: a los tribunales. “No nos podemos quedar en el #Metoo porque entonces esta gente sigue agrediendo, porque nadie ha dado sus nombres. Excepto dos o tres productores de Estados Unidos. Habrá otros muchos que sus nombres no se han dado y siguen impunes”, alertó.