¡Qué bárbaras son a veces las personas que hacen bromas a otras!
Los famosos también las sufren y algunos de ellos son verdaderos expertos.
10. Una broma macabra de Kit Harington a su novia
© eastnews © RLeslieSource/ twitter
Qué broma más extraña. No sabemos qué estaba pensando el actor Kit Harington (Jon Snow en “Juego de tronos“) cuando decidió divertirse de una manera tan extraña a costa de Rose Leslie (Ygritte en ”Juego de tronos"). Nada menos que colocar una cabeza falsa (por cierto, una réplica exacta de él) en el refrigerador. La pobre mujer, después de verla, tuvo que tomarse su tiempo para recuperarse.
George Clooney adora las bromas, pero no menos que su amigo Brad Pitt, que durante el rodaje de la película “La nueva gran estafa“, envió a todo el equipo una nota en la que rezaba que llamarán a Clooney ”señor Ocean", evitando, además, mirarle a los ojos. Cuando George se enteró de quién era el ideólogo de esta broma (por supuesto, al principio no entendió nada de lo que estaba pasando), Brad Pitt acabó siendo testigo de cómo una pegatina con contenido frívolo adornaba su auto.
El estricto Severus Snape también sabe cómo bromear. Al menos, lo podía hacer Alan Rickman, el actor que interpretaba a este personaje en la saga de Harry Potter.
Esta vez, Daniel Radcliffe (Harry Potter) acabó convirtiéndose en víctima del ingenio de Alan. En la escena donde todos estaban en la sala principal metidos en sacos de dormir, Rickman colocó a Daniel un cojín de pedos dentro. El efecto fue sorprendente.
Esto fue lo que ocurrió en una cena del Palacio de Kensington, donde había sido invitada la famosa presentadora Oprah Winfrey. Cuando esta piropeó acerca de la cintura fina y elegante de Lady Di y preguntó cómo Diana era capaz de mantenerla, cuando la mesa estaba saturada de platillos riquísimos con un alto contenido calórico, la princesa respondió modestamente que probaba raciones pequeñas, pero con frecuencia. Sin embargo, en realidad, sirvieron diferentes versiones de los mismos platillos. Mientras Lady Di disfrutaba de una mousse baja en grasa, Oprah saboreaba su variante normal, repleta de crema y mayonesa.
© depositphotos © depositphotos
Una broma terrible fue la que le preparó Woody a su amigo Sean. Cuando Penn salía de la comisaría, fue abordado por un enorme matón con una máscara que lo tomó como rehén. El actor, aterrado, ya ni sabía cómo actuar cuando apareció Harrelson para tranquilizarlo poniendo en evidencia que todo era una broma. Pero Sean Penn no se olvidó y preparó una buena venganza para su amigo. Por la noche, iban juntos, supuestamente, a una fiesta en otra ciudad, cuando el auto comenzó a dar problemas. Sean pidió a Woody que lo empujara y, cuando este bajó del vehículo, aceleró y se marchó. Harrelson quedó solo en la carretera.
Tuvo que caminar toda la noche para llegar a la ciudad más próxima. Merecido lo tenía.
El ingenuo actor David Tom, confiando en su amigo Aaron, contó a todo el mundo (incluidos los periodistas), que en el patio trasero de su casa aterrizó un meteorito. El "meteorito" resultó ser una bomba de hielo artificial, colocada por Paul. Cuando se supo la verdad sobre este hecho, Tom quedó ampliamente decepcionado: claro, cualquiera desea convertirse en propietario de materia extraterrestre.
Cerca del cuarto de baño, Josh Hutcherson colocó un maniquí como si fuera un cadáver, picado por abejas asesinas (era material de la película "Los juegos del hambre", donde participó junto a Jennifer). Además, le puso en la mano un rollo de papel higiénico. La pobre Jennifer, que tropezó con este monstruo, casi muere aterrorizada. Bromas así no las encaja cualquiera.
El astuto James publicó en su Instagram una foto con Lana y un comentario asombroso: “Acabamos de casarnos“ (la foto fue retirada más tarde). Cuando los aficionados casi se vuelven locos por la noticia, rápidamente admitió la broma. Nos preguntamos: ¿cómo reaccionó la ”recien casada"?
Esta extraña historia tuvo lugar durante el rodaje de la película de suspenso "Sin límites". Robert, conociendo que Bradley odiaba tanto las sardinas como las anchoas, pidió que le llevarán a su habitación 13 pizzas, con estos ingredientes. ¿Para qué? Nadie lo sabe, excepto este actor tan genial y sorprendente.
© depositphotos © depositphotos
Ashton Kutcher junto al director de la película "X-Men" provocaron a Hugh Jackman un susto de muerte. Cuando el actor, desprevenido, fue invitado a evaluar una increíble colección de pinturas, estas empezaron a arder. Los bomberos concluyeron que el incendio había sido provocado y culparon del suceso al pobre Jackman.
A Hugh le explicaron que, o bien tenía que hacer frente al daño multimillonario ocasionado, o acabaría en la cárcel. Por cierto, cuando se desveló la trama de los bromistas, el actor se comportó de la manera más noble: apreció el humor y no tomó represalias. Aunque debería.
Foto de portada depositphotos, eastnews