Tratamiento del cáncer de próstata que no desaparece o que regresa después del tratamiento

Si su nivel de PSA en la sangre muestra que el cáncer de próstata no ha sido curado o ha regresado (recurrencia) después del tratamiento inicial, el tratamiento adicional a menudo puede aún ser beneficioso.

El tratamiento de seguimiento dependerá de si se cree que el cáncer está localizado y qué otros tratamientos recibió.

Pueden hacerse estudios por imágenes, tales como las tomografías computarizadas, las imágenes por resonancia magnética, o las gammagrafías óseas para tener una mejor idea de la localización del cáncer.

El cáncer que aún se cree está en la próstata o en su alrededor

Si se sigue creyendo que el cáncer está únicamente en el área de la próstata, puede ser posible un segundo intento para curar el cáncer.

Después de la cirugía: en caso de que se haya hecho una prostatectomía radical, algunas veces la radioterapia puede ser una opción junto con la terapia hormonal.

Después de la radioterapia: si la radiación fue su primer tratamiento, las opciones de tratamiento pueden incluir la crioterapia o la prostatectomía radical, pero cuando se llevan a cabo estos tratamientos después de la radiación, esto conlleva un mayor riesgo de efectos secundarios, tal como incontinencia.

Por lo general, repetir la radioterapia no es una opción debido a que hay más posibilidades de efectos segundarios graves, aunque en algunos casos la braquiterapia puede ser una opción como un segundo tratamiento después de la radiación externa.

En ocasiones, puede que no esté claro exactamente dónde se encuentra el cáncer restante en el cuerpo. Si el único signo de recurrencia del cáncer es un nivel de PSA que está aumentando (en lugar del cáncer que se observa en estudios por imágenes), otra opción para algunos hombres podría ser una observación minuciosa en lugar de tratamiento activo.

El cáncer de próstata a menudo crece lentamente, por lo que incluso si no regresa, puede que no cause problemas durante muchos años, momento en el que el tratamiento adicional podría entonces ser considerado.

En un estudio de la Johns Hopkins University, en los hombres cuyo nivel de PSA comenzó a aumentar después de una cirugía para cáncer de próstata, hubo un promedio aproximado de 10 años antes de que se presentaran signos de cáncer propagado a partes distantes del cuerpo.

Por supuesto que estos signos aparecieron más pronto en algunos hombres y más tarde en otros.

Varios factores, tal como la rapidez con que el PSA aumenta y la puntuación original Gleason pueden ayudar a predecir cuán pronto el cáncer aparecerá en distantes partes del cuerpo, causando problemas.

Si el PSA aumenta muy rápidamente, algunos médicos pueden recomendar que usted comience el tratamiento incluso antes de que el cáncer se pueda observar por medio de exámenes o que cause síntomas.

La observación puede ser una opción más atractiva para ciertos grupos de hombres, como aquellos de edad más avanzada y en quiénes el nivel de PSA aumenta lentamente. Aun así, no todos los hombres pueden sentirse cómodos con este enfoque.

El cáncer que se ha propagado

Si el cáncer se propagó fuera de la próstata, con mayor probabilidad alcanzará primero a los ganglios linfáticos adyacentes, y luego a los huesos. Con menos frecuencia, el cáncer se propagará al hígado o a otros órganos.

Cuando el cáncer de próstata se ha propagado a otras partes del cuerpo (incluyendo los huesos), es posible que la terapia hormonal sea el tratamiento más eficaz. Sin embargo, la terapia hormonal probablemente no curará el cáncer y en algún momento podrá dejar de surtir efecto. Por lo general, el primer tratamiento es un agonista o antagonista de hormona liberadora de la hormona luteinizante (LHRH) (u orquiectomía). Si esto deja de ser eficaz, se agrega un medicamento antiandrógeno. Otra opción puede ser recibir quimioterapia junto con la terapia hormonal. También se pueden usar otros medicamentos dirigidos a las metástasis en los huesos.

Cáncer de próstata hormono-refractario y cáncer resistente a la castración

La terapia hormonal a menudo es muy eficaz en reducir el tamaño o desacelerar el crecimiento del cáncer de próstata que se ha propagado, aunque por lo general se vuelve menos eficaz con el pasar del tiempo. Los médicos utilizan diferentes términos para describir los cánceres que ya no responden a las hormonas.

El cáncer de próstata resistente a la castración es cáncer que sigue creciendo a pesar de que la terapia hormonal (una orquiectomía o un agonista o un antagonista de LHRH) mantiene la testosterona en el cuerpo a un nivel tan bajo como lo que se esperaría si los testículos fueran extraídos (niveles de castración). No obstante, el cáncer puede que aún responda a otras formas de terapia hormonal.

El cáncer de próstata hormono-refractario es cáncer en el que ninguna forma de terapia hormonal ya es eficaz.

Actualmente, los hombres con cánceres de próstata que siguen creciendo a pesar de la terapia hormonal inicial tienen muchas más opciones de tratamiento que las que tuvieron hace algunos años.

Si un antiandrógeno no fue parte de la terapia hormonal inicial, con frecuencia se agrega en este momento. En caso de que el hombre esté recibiendo un antiandrógeno, pero el cáncer siga creciendo, suspender el antiandrógeno (mientras se continua con otros tratamientos hormonales) parece ayudar algunas veces.

También pueden ser útiles otras formas de terapia hormonal por un tiempo, especialmente si el cáncer está causando pocos o ningún síntoma. Esto incluye abiraterona (Zytiga), enzalutamida (Xtandi), ketoconazol, estrógenos (hormonas femeninas), y corticosteroides.

La  vacuna contra el cáncer de próstata, sipuleucel-T (Provenge), es otra opción para los hombres cuyo cáncer está causando pocos o ningún síntoma. Este tratamiento puede no reducir los niveles de PSA, pero a menudo puede ayudar a los hombres a vivir por más tiempo.

Para los cánceres que ya no responden a la terapia hormonal inicial y que están causando síntomas, pueden existir varias opciones disponibles.

A menudo, la  quimioterapia con el medicamento docetaxel (Taxotere) es la primera opción debido a que ha demostrado ayudar a los hombres a vivir por más tiempo, así como a reducir el dolor.

Si el docetaxel no da buenos resultados o deja de funcionar, puede que otros medicamentos de quimioterapia, como cabazitaxel (Jevtana), sean útiles.

Otra opción puede ser un tipo diferente de terapia hormonal, como abiraterona o enzalutamida (si aún no se han tratado).

Los bifosfonatos o el denosumab pueden a menudo ayudar si el cáncer se propagó a los huesos. Estos medicamentos pueden reducir el dolor e incluso desacelerar el crecimiento del cáncer en muchos hombres.

También otros medicamentos y métodos pueden ayudar a mantener bajo control el dolor y otros síntomas. La radioterapia externa puede ayudar a tratar el dolor de los huesos si sólo está presente en pocos lugares. A menudo, los radiofármacos pueden reducir el dolor si está más generalizado, y también pueden desacelerar el crecimiento del cáncer.

Asegúrese de informar a su médico y a todo el equipo de profesionales de la salud que le atiende si usted siente dolor causado por el cáncer de próstata. Hay muchos medicamentos muy eficaces que pueden aliviar el dolor. Para más información, lea  Cáncer avanzado.

Actualmente se están probando varios  medicamentos nuevos y prometedores contra el cáncer de próstata, incluyendo vacunas, anticuerpos monoclonales y otros tipos de medicamentos recientes. Debido a que la capacidad de tratar el cáncer de próstata hormono-refractario aún no es lo suficientemente eficaz, se exhorta a los hombres a participar en estudios clínicos para explorar nuevas opciones.

La información sobre los tratamientos que se incluye en este artículo no constituye una política oficial de la Sociedad Americana Contra El Cáncer y no tiene como objetivo ofrecer asesoramiento médico que remplace la experiencia y el juicio de su equipo de atención médica contra el cáncer.

Su objetivo es ayudar a que usted y su familia estén informados para tomar decisiones conjuntamente con su médico.

Es posible que su médico tenga motivos para sugerir un plan de tratamiento distinto a estas opciones generales de tratamiento. No dude en hacer preguntas a su médico sobre sus opciones de tratamiento.

Te podría interesar

Deja tu comentario