Para el hatha yoga original (el yoga físico) sólo necesitas tu cuerpo y una mente presente. Por lo general, es suficiente con una indumentaria de ropa cómoda y sencilla, un tapete de yoga o una manta donde puedas practicar, pies descalzos, apertura de mente y corazón y estar dispuesto a darte un rato para nutrir tu cuerpo, relajar tu mente y elevar tu espíritu.
Algunas personas que por alguna razón no tienen movilidad, que no puedan practicar asanas (posturas de yoga), también pueden hacer yoga.
La meditación, la relajación y la respiración también son yoga. Al igual que la actitud amorosa, abierta, la vida compasiva y generosa.
El estar completamente presentes y maravillarnos con la grandeza de la vida también es yoga. El yoga, además de una seria de técnicas antiguas, es una actitud y un estado mental que nos llevan a un alto nivel de conciencia, salud y plenitud.
¿Cuál estilo escoger?
Eso depende del carácter de cada uno, de sus particularidades físicas y sus necesidades, porque no todos los yogas son iguales, aunque comparten una misma esencia.
Pregúntate cuál es tu interés en el yoga y busca un estilo que compagine con esto en esta guía de estilos. Por ejemplo, crecimiento interior, espiritualidad, armonía y motivación, terapia física para el dolor o mejorar la salud.
Por lo general recomiendo comenzar por una clase de hatha yoga. Su característica es que es pausada, meditativa y por lo general más suave que otras formas de yoga.
Es un yoga que se adapta a la mayoría de cuerpo y estados de salud y que conserva la facultad del yoga de relajar mientras promueve la buena salud y eleva la energía.
Hay quienes quieren algo más rápido e intenso, en cuyo caso pueden escoger una forma de vinyasa (yoga de secuencias fluidas). Es esencial comenzar por una clase para principiantes o de nivel básico.
¿Cómo prepararse para hacer yoga?
La preparación para el yoga, incluso para los yoguis con experiencia, es muy sencilla. Sólo necesitas estar dispuesto a hacer una pausa completa en tu vida por un periodo de tiempo. Lo que diferencia al yoga en esencia, de otras actividades físicas, es que nuestra mente está completamente presente en lo que estás haciendo.
Prepárate para no estar disponible y para tener conciencia plena. Si estás pensando en algo más, estás dejando ir lo más valioso que tiene. Cuenta con tiempo y silencio a la llegada y a la salida.
No comas dos horas antes o espera tres si tu última comida no fue tan ligera. Para darte una idea de lo que vas a hacer puedes familiarizarte con estas posturas de yoga para principiantes. Antes de la primera clase puedes preguntar si debes llevar algo, conocer el lugar, lee un poco sobre qué de qué se trata el yoga, aunque no debes “saber” nada. Relájate y fluye.
¿Qué ponerse para la clase yoga?
La regla principal para en la indumentaria de yoga es comodidad. Prefiere ropa suelta o al cuerpo, pero en un material que te permita completa libertad de movimiento.
Una camiseta y un pantalón cómodos son la mejor opción. El blanco es un color muy lindo para la práctica de yoga porque representa la luz. Escoge colores que resuenen contigo. Pero ojo: no tienes que comprar nada “especial” para yoga.
Diviértete y elige algo con lo que te sientas bien, pero no le des mucha relevancia a tu indumentaria. La liberación comienza por ahí. El yoga es maravilloso pero también se ha vuelto una industria millonaria y frívola.
Tantos productos yoguis contradicen su esencia, nos confunden y nos olvidamos de que se trata de regresar a lo simple, de desprendernos de la necesidad de comprar o tener. El yoga se practica con los pies descalzos para estar con los pies firmes sobre la tierra.
¿Qué llevar?
Para el yoga no se necesita prácticamente nada además de tu presencia física y mental y un tapete de yoga. Es mejor que lleves tu propio tapete a clase (o mat, como también se le conoce también en español a pesar de ser un anglicismo). Hay algunos lugares donde se prestan o alquilan pero no lo recomiendo si vas a tener el yoga como una práctica constante.
No solo te sentirás más cómodo apoyando tu cuerpo y tu cara si tienes tu propio mat, sino que te ayuda a conectarte mejor. En el yoga decimos que el tapete guarda tu prana, tu energía vital.
En algunos estilos de yoga energéticos donde hay mucho esfuerzo y sudor, se recomienda que lleves una toalla y una botella de agua, pero en la mayoría de versiones de hatha yoga (hatha yoga es la práctica física del yoga) no se bebe agua durante las clases.
Es posible que haya una relajación final donde la temperatura del cuerpo baja, así que ten a la mano algo para abrigarte.
¿Cómo prácticar en casa?
Es una opción que dediques unos minutos al día para estar en silencio a través de la meditación y que hagas algunas posturas básicas por tu cuenta siempre y cuando tengas en cuenta unas recomendaciones para tener una práctica segura. Para esto, puedes comenzar con estos estiramientos muy sencillos o con estas 10 posturas básicas de yoga.
Pero no me cabe duda de que hacer yoga con un profesor es lo mejor, en especial al principio. Un buen profesor va a transmitirte una energía especial que te llena de paz y positivismo, va a asegurarse de que no te lastimes, de que hagas la postura correctamente para que tengas sus beneficios físicos, mentales y emocionales. Compartir la práctica con un bonito grupo también es algo muy especial.
Algunas personas se sienten algo tímidas para ir a una clase de yoga por primera vez. En yoga no hay juicios, competencia ni comparaciones, así que no hay nada qué temer.
Sólo abrirnos a ser lo que somos y a soltar. El miedo es una señal de que estamos dejando lo conocido y que estamos creciendo espiritualmente. Te lo vas a agradecer siempre.
¿Qué puedes esperar de una clase de yoga?
Las prácticas de yoga pueden variar bastante de una tradición a otra. Algunas pueden tener un componente más espiritual, mientras que otras pueden centrarse en el trabajo físico. Algunos estilos de yoga mantienen las posturas durante algunos segundos o minutos, mientras que otros se fundamentan en secuencias fluidas.
En la mayoría de clases el profesor hace una demostración y luego va corregirte para asegurarse de que no haya riesgos y sí beneficios. Es posible que no haya preguntas durante la clase y que las preguntas se hagan al final. Una clase de yoga más clásica puede contener una algunos mantras, ejercicios de respiración (pranayama), cantos y una relajación.
También en el yoga tradicional puedes encontrar un ambiente místico de símbolos, inciensos e imágenes que alegran y sirven de inspiración.
¿Qué hacer en una clase de yoga?
Esencialmente, hacer una pausa del discurso mental. Llega con tiempo para sintonizarte con el ambiente, escucha instrucciones y deja los pensamientos a un lado. Sólo necesitas apertura y buena actitud. Poco a poco verás que tu cuerpo se relaja y se estira cuando tu mente esté relajada.
Trata de mantener la conciencia plenamente en lo que estás haciendo y trata de no compararte con nadie. Concéntrate en lo tuyo y no te distraigas con lo que venga de afuera ni des cuerda a tu mente si se va hacia el futuro o al pasado. Tráela de nuevo. No te ofendas si te corrigen. En yoga no hay nadie “mejor”. Intenta no juzgar si te enfrentas por primera vez a un lenguaje diferente o a unas técnicas desconocidas.
Fluye, suelta, relájate, escucha tu cuerpo y respeta sus límites, respira plenamente por la nariz y cuando puedas cierra los ojos. Si pierdes el equilibrio o no logras una posturas, no pasa nada. El yoga es un camino, no un objetivo. Ríete e inténtalo de nuevo. Diviértete.
En yoga es fundamental que cada postura se haga de una manera consciente y no mecánica, poniendo atención a tu cuerpo, al lugar que estás trabajando e intentando relajar las partes que tengas tensionadas. El yoga es un ejercicio de auto observación.
El yoga se practica con los pies descalzos para estar bien cerca de la tierra y para poder estar muy firme en tus ejercicios.
En yoga se pone especial atención en la respiración y siempre se inhala y exhala por la nariz, a menos que se especifique lo contrario (hay excepciones). Un componente central del yoga es el pranayama, pues el prana es nada más y nada menos que nuestra energía vital.
No es conveniente comer poco antes de hacer yoga. Lo mejor es ingerir alimentos ligeros tres o mínimo dos horas antes de la práctica.
Con excepción del hot yoga (yoga a temperaturas altas), no es frecuente ni necesario beber agua durante las clases, pero es importante hidratar el cuerpo luego de las prácticas para ayudar a la limpieza que hiciste en tu cuerpo.
Fuente: http://elyoga.about.com
