La mayoría de las personas solo espera la llegada de la noche para lanzarse rápidamente a la cama y dormir hasta la mañana, a piernas sueltas.
Sin embargo, sus dulces sueños podrían irse a la deriva a causa de un súbito espasmo muscular…
Estos calambres, tan comunes en mujeres embarazadas y atletas, suelen deberse al cansancio acumulado del día.
Conoce unos sencillos trucos para prevenir la aparición de tan inoportunos ataques nocturnos.
¡Pruébalos, y tus noches serán muy placenteras, ya verás!
Remedio para los calambres
1. Jabón
¿Sabías que el jabón es muy efectivo para relajar los pies cansados? Pues sí, solo tienes que ocultarlo debajo de las sábanas, o si lo deseas, debajo de la colcha.
¡Increíble, pero funciona!
Además, si el calambre muscular te ataca durante el día, basta colocar un trozo de jabón sobre la zona afectada, y el malestar se detendrá como por arte de magia.
2. Salmuera
Estos espasmos ocurren generalmente cuando la persona está deshidratada, sin embargo, resulta un poco engorroso beber mucha agua antes de dormir. La salmuera puede ser la solución, ya que contiene grandes cantidades de sal, que ayudará a retener la humedad existente en el cuerpo.
3. Plátano
Si consumes alimentos ricos en potasio, tus calambres se mantendrán a raya. Este elemento abunda en los plátanos, higos, nectarinas, col rizada o pescado de mar.
4. Baño caliente
No hay nada mejor que un buen baño caliente para relajarse, luego de un día agotador. Si has caminado mucho o has estado de pie, un baño caliente te dejará como nuevo. Si no tienes la oportunidad de hacerlo, basta aplicar una compresa caliente sobre los músculos de tus cansadas piernas. ¡Este es mi remedio favorito!
Si aplicas estos sencillos consejos, los espasmos musculares no volverán a importunar tu sueño. ¡Y tus mañanas serán mejores, ya lo verás!
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