La faringitis es una inflamación de la garganta, o faringe, a menudo causada por una infección bacteriana o vírica.
Síntomas de la faringitis
Los síntomas de un dolor de garganta pueden variar dependiendo de la causa. Los signos y síntomas pueden incluir:
Dolor o sensación de picazón en la faringe
Dolor que empeora al tragar o hablar (odinofagia)
Dificultad para deglutir (disfagia)
Sequedad de garganta
Dolor e inflamación en las glándulas en el cuello o la mandíbula
Amígdalas rojas, inflamadas (amigdalitis)
Manchas blancas o pus en las amígdalas
Voz ronca
Rechazo a la alimentación (bebés y niños pequeños)
Las infecciones más comunes que causan un dolor de garganta puede dar lugar a otros signos y síntomas:
Fiebre
Escalofríos
Tos
Nariz que moquea
Estornudos
Dolores en el cuerpo
Dolor de cabeza
Náuseas o vómitos
Cuándo consultar a un médico
Lleve a su hijo a un médico si el dolor de garganta de su hijo no desaparece. Busque atención inmediata si su hijo tiene signos graves, tales como:
Dificultad para respirar (disnea)
Dificultad para deglutir (disfagia)
Babeo inusual, lo que puede indicar una incapacidad para tragar (sialorrea)
Los adultos deben acudir al médico si se produce cualquiera de los siguientes problemas asociados con dolor de garganta:
Dolor de garganta severo o que dura más de una semana
Dificultad para deglutir (disfagia)
Dificultad para respirar (disnea)
Dificultad para abrir la boca
Dolor en las articulaciones
Dolor de oídos
Erupción
Fiebre de más de 38º C
Sangre en la saliva
Frecuentes dolores de garganta recurrentes
Bulto en el cuello
Ronquera que dura más de dos semanas
Las estrategias de cuidado en el hogar suelen proporcionar un alivio temporal. Pruebe con estas estrategias: