Las propiedades del aceite de orégano pueden ser muy beneficiosas a la hora de eliminar toxinas y tratar problemas del aparato respiratorio, como resfriados, infecciones o inflamaciones
Todos los días estamos expuestos a una amplia variedad de factores que pueden afectar la salud de nuestro sistema respiratorio.
La contaminación ambiental, los químicos que contienen los productos que utilizamos, los radicales libres y hasta algunos alimentos, tarde o temprano, nos provocan molestias como la gripe, el resfriado y las alergias.
Si bien estos se desarrollan en diferentes condiciones en función de cada organismo, los síntomas suelen ser similares y, casi siempre, están indicando que nuestros pulmones necesitan un apoyo para su limpieza.
En la actualidad se han desarrollado muchos fármacos y productos sintéticos que tienen como fin ayudar a controlar los síntomas de las molestias respiratorias.
Sin embargo, no está recomendado su consumo excesivo ya que, a largo plazo, puede ocasionar efectos secundarios en otros sistemas del cuerpo.
Por fortuna, existen métodos efectivos y 100% naturales que pueden apoyar su buen funcionamiento.
A continuación queremos compartirte los maravillosos beneficios del aceite de orégano, un producto que se está haciendo popular por sus propiedades antibióticas y antihistamínicas.
¡Descúbrelo!
El aceite de orégano ha logrado posicionarse como uno de los antibióticos naturales más poderosos que podemos encontrar.
Tiene una alta concentración de sustancias antioxidantes que disminuyen el impacto negativo de los radicales libres y las toxinas.
Sus compuestos activos tienen el poder de frenar el crecimiento bacteriano y viral, ala vez que disminuyen las infecciones y fortalecen el sistema inmunitario.
Se dice que la primera vez que se utilizó a nivel medicinal fue en la Antigua Grecia, lugar donde fue remedio para tratar el dolor, las inflamaciones y algunas enfermedades infecciosas.
Dado que se comprobó que es muy eficaz, hoy por hoy sigue siendo una de las mejores alternativas, sobre todo para todo lo que tiene que ver con el sistema respiratorio.
Contiene calcio, magnesio, hierro y otros importantes minerales que ayudan a mejorar la salud física y mental.
También aporta vitaminas A y C, dos sustancias esenciales para mantener las defensas activas.
Contiene fenoles, una sustancia antiséptica, antiviral y antiinflamatoria que le confiere una parte importante de sus beneficios.
Asimismo, concentra en un 70% una sustancia llamada carvacrol, que se reconoce como un potente antiviral.
Una de las ventajas de este producto sobre otros remedios es que no provoca efectos indeseados en el organismo y, en su lugar, le aporta maravillosos beneficios.
Y es que, además de limpiar el aparato respiratorio, su consumo previene el envejecimiento prematuro, mejora la digestión, ayuda a perder peso y calma dolencias comunes como los cólicos menstruales, el dolor de cabeza y la tensión muscular.
Aunque ahora se puede adquirir aceite de orégano ya listo para su uso, siempre es recomendable prepararlo en casa para estar más seguros de sus propiedades.
Muchas de las presentaciones comerciales carecen de nutrientes, dado que son sometidas a procesos de refinamiento que alteran su calidad.
La buena noticia es que la receta es muy fácil de seguir y, de hecho, sus ingredientes pueden estar al alcance de tu mano.
¿Conocías este producto para mejorar tu salud respiratoria?
Ahora que sabes cómo prepararlo y consumirlo, no dudes en tenerlo en cuenta ante cualquier dificultad.