A menudo, vemos cómo personas que logran mantenerse en línea saborean un delicioso pedazo de pizza o pastel y, automáticamente, resuena esa molesta y curiosa preguntita en nuestra cabeza: "¿Cómo lo hace?".
En general, no encontramos otra explicación que su ''buena'' genética. Sí, no voy a mentir, los genes juegan un papel importante a la hora de asimilar los alimentos.
De todos modos, llega una edad y un momento en la vida en el que hasta el que nunca tuvo que medir nada de lo que comía se ve obligado a hacerlo (nadie puede sentirse bien viviendo a base de hamburguesas y galletas). En esta ocasión es que este plan alimenticio viene como anillo al dedo...
¿Todo lo que yo quiera?
No es necesariamente TODO lo que quieras. Pero así como nadie puede vivir bien alimentándose solo con comida chatarra, tampoco es sano para una persona privarse siempre de todo lo que más le gusta. ç
Ya habrás escuchado hablar de lo importante que es el equilibrio respecto a la alimentación.
Entonces, ahora te contaré sobre una dieta que te permite comer todo lo que desees (siii, ¡PIZZA!), y te hará sentir mejor que nunca.
¿De qué se trata?
Esta propuesta consiste en contar los macronutrientes, ¡olvida las calorías! La proporción de macronutrientes que debas consumir varía de acuerdo a tu peso, tu estatura y tus necesidades físicas.
Estos se dividen en tres categorías (de los que seguro ya has escuchado hablar): carbohidratos, proteínas y grasas.
La idea de este plan de alimentación es, en primer lugar, hacer que te sientas bien y puedas satisfacer tus antojos cuando quieras y, al mismo tiempo, alcances el peso que deseas.
La diferencia de esta dieta con todas las demás es que no eliminas ningún grupo de comida, solo mides las porciones de cada uno.
¿Cómo implementarla?
Puede parecer difícil contar y medir la cantidad de alimentos que comes de cada grupo.
Pero es solo cuestión de incorporar el hábito; una vez que te acostumbres lo harás sin pensar.
En primer lugar, debes conocer tu necesidad calórica diaria, ya que de eso dependerá la cantidad que debas comer de cada macronutriente.
Una vez que sepas ese número, debes fraccionarlo en tres: 35% de proteínas, 20% de grasa y 45% de carbohidratos.
Luego para traducir ese porcentaje en gramos o calorías diarias debes realizar el siguiente cálculo, suponiendo que tu necesidad calórica diaria son 1400 calorías:
(0.20) x 1.400 = 280 kcal / 9 (9 calorías por cada gramo de grasa) = apróximadamente 31 gramos de grasas por día.
(0.35) x 1.400 = 490 kcal / 4 (4 calorías en cada gramo de proteína) = apróximadamente 123 gramos de proteínas por día.
(0.45) x 1.400 = 630 kcal / 4 (4 calorías por cada gramo de carbohidratos) = apróximadamente 158 gramos de carbohidratos por día.
Y para hacer esto un poco más simple, puedes ayudarte con apps gratuitas como MyFitnessPal que te permiten ingresar el registro diario de todo lo que comes y te mantienen motivado.
Somos lo que comemos
Recuerda que las decisiones que haces en tu alimentación influyen en muchos otros aspectos además de tu peso. Comer una gran cantidad de grasas saturadas y alimentos procesados terminará tapando tus arterias y afectará tu corazón.
Por el contrario, los alimentos naturales y proteicos te ayudarán a sentirte más fuerte y poderosa, además de ayudarte a perder peso.
No deberíamos llamar a esto una "dieta", sino más bien un verdadero estilo de vida.
Entonces, ¿qué piensas? En mi opinión, cualquier plan alimenticio que incluya pizza o pastel de chocolate es perfecto.