En época de vacaciones, fechas patrias, fines de semanas largos y en verano, un lugar al que muchos escogen ir es a la playa, al campo o a la piscina, lugares en donde la incidencia solar es muy fuerte, pero no sólo en días como esos debemos cuidarnos de los rayos del sol, sobre todo los rayos UV, en el día a día también pasamos un determinado tiempo en espacios abiertos, en donde dichos rayos entran en contacto con nuestra piel.
Por este motivo, debemos tener cuidado con la cantidad de horas que pasamos expuestos a los rayos solares, y usar siempre un protector solar.
Los rayos ultravioleta son parte de la energía solar que llega a la tierra. Al estar formados por ondas muy cortas son invisibles; pero eso no quita el daño que pueden ocasionar. La radiación ultravioleta (UV) es una forma de energía radiante que proviene del sol.
Las diversas formas de radiación se clasifican según la longitud de onda medida en nanómetros (nm), que equivale a un millonésimo de milímetro. Cuanto más corta sea la longitud de onda, mayor energía tendrá la radiación.
Existen tres categorías de radiación UV
¿Qué efectos tienen en la piel de los rayos UBA y UVB?
Radicales libres: las radiaciones UV son una de las principales causas de los radicales libres. Los radicales libres pueden dañar el material genético de las células dañando a nuestro cuerpo, causando, en el mejor de los casos el envejecimiento, y en el peor, graves enfermedades, entre ellas el cáncer.
Ruptura de las fibras de colágeno: el sol daña gravemente las fibras de colágeno, causando una acumulación de elastina anormal, lo cual, hace que ciertas enzimas llamadas metaloproteinasas se produzcan en grandes cantidades para reparar los daños, pero a veces, estas enzimas producen fibras de colágeno desorganizadas llamadas “cicatrices solares”.
Sistema inmune: cuando la piel se expone directamente al sol, se liberan ciertas sustancias que suprimen la función de células de la piel llamadas células de Langerhans. Estas células toman los antígenos presentes en la piel y los transportan a los nódulos linfáticos, activando el sistema inmunológico para proteger el cuerpo contra agentes dañinos.
¿cómo proteger la piel de los rayos UV?
Algo de lo que debemos estar pendientes siempre es de cuidar y proteger nuestra piel de los rayos solares, ya que, la incidencia de los rayos Uv en nuestra piel puede causar efectos graves. Debemos recordar que la piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, y que protege a nuestro organismo del mundo exterior. Algunas cosas sencillas que podemos incluir en nuestra rutina diaria son:
Ponerse bloqueador solar.
Usar ropa que cubra y proteja nuestra piel.
Usar algún sombrero o gorra que cubra nuestra cabeza, ya que, el cuero cabelludo también es muy sensible y puede verse afectado.
Ponerse lentes de sol, los cuales, protegen a nuestros ojos de los rayos UV y también protege la piel que se encuentra alrededor de ellos, que es una capa muy fina y sensible.
Fuente:lavidalucida.com